08 de septiembre de 2019
El siervo Dios, el Pastor Noé Lee, ministro de la Misión Buenas Nuevas Quito visitaba durante 3 días las iglesias de Cañar y Guayaquil llevando el evangelio a los hermanos, el cual los llenaba de nuevas fuerzas para avanzar en la vida de creencia.
El jueves 5 de septiembre los hermanos de la ciudad de Cañar recibían al siervo de Dios con gran gozo en su corazón, por poder tener la visita del siervo después de tanto tiempo. Por la mañana los hermanos visitaban la iglesia para tener la comunión y recibir la guía a través del Pastor.
Ya por la noche, los hermanos de Cañar se reunían para el culto junto al Pastor Noé. Varias personas invitadas podían escuchar por primera vez el evangelio de la salvación, también el Pastor Noé compartía a través de la Reina Ester y como el decidir en el corazón es muy importante para avanzar en la vida de creencia.
El expositor hablaba sobre Ester del 4 al 5 y como al principio la Reina Ester no tenía un corazón decidido, pero al escuchar la voz de Mardoqueo ella podía cambiar fácilmente e ir delante del Rey Asuero, así ella podía hallar misericordia delante del rey porque él no se fijaba en la apariencia o en su condición, sino que el rey la amaba. Así como Dios nos ama, pero él solo quiere ver una cosa “La decisión de nuestro corazón”.
Con esta palabra los hermanos de Cañar podían tener la esperanza en su corazón para poder avanzar en la dificultad y en la vida de creencia. Por la mañana del viernes el siervo de Dios podía visitar la iglesia de la Troncal de un Pastor que participó en el CLF realizado en la misma ciudad. Compartiendo el evangelio el Pastor y su familia podía abrir su corazón hacia la Misión y todas las actividades que se realizaran.
Por la tarde el siervo de Dios podía llegar a la iglesia de Guayaquil, los hermanos se encontraban muy agradecidos y le daban la bienvenida al Pastor Noé. Ya por la noche se podía tener el culto en donde Pastor compartía sobre la Reina Ester y como Dios quebraba la confianza que tenía Pedro en si mismo. Los hermanos de Cañar y Guayaquil se encontraban muy agradecidos por la visita del siervo y esperan seguir compartiendo la palabra de Dios.
