25 de marzo 2022, Querétaro, México. Se realizó una cena pastoral a la que asistieron 175 líderes cristianos de diferentes iglesias y denominaciones, para fortalecer sus corazones con la palabra de Dios. Este encuentro tuvo lugar en la finca “La Reliquia”, ubicada en la ciudad de Querétaro, y fue organizada por la Iglesia Buenas Nuevas Querétaro. El expositor fue el pastor Pablo Shin, presidente del Congreso de Líderes Cristianos México, Centroamérica y el Caribe.
Primeramente, el pastor Salvador Pérez, pastor de la Iglesia Buenas Nuevas Querétaro y maestro de ceremonias de la cena pastoral, dio la bienvenida a todos los asistentes. Después, el pastor Eduardo Arellano, director del CLF en México, usó la palabra para promocionar el próximo CLF Latinoamericano con el pastor Ock Soo Park que se realizará del 14 al 17 de abril del presente año en la CDMX, para después dar paso a la oración de inicio, dirigida por el pastor Emmanuel Cruz, presidente de Misión Buenas Nuevas México.
El tiempo musical de la noche fue dirigido por el Grupo Alba, grupo musical oficial de Misión Buenas Nuevas México, quienes interpretaron conmovedoras alabanzas que prepararon el corazón de los presentes para recibir la palabra de Dios.
Durante la predicación, el pastor Pablo Shin compartió en base a Génesis 25:19-26. Comenzó explicando que Dios dio a Rebeca, madre de Esaú y Jacob, la promesa del nacimiento de dos naciones a través de ella, de las cuales el destino sería: “El mayor servirá al menor”. Dijo que en Romanos 9:6-8, el corazón del apóstol Pablo se dolía por el pueblo de Israel, ya que ellos no querían recibir el evangelio en el que creyó Abraham, la fe en el Mesías, sino que creían que por ser descendientes carnales de Abraham alcanzarían la justicia, sin embargo, explicó el pastor, la Biblia aclara que no todos los que nacen de carne y sangre son llamados hijos, el verdadero heredero de la promesa es el hijo de la fe, no el de la carne, pues Dios había prometido a Abraham que en su simiente serían benditas todas las familias de la tierra, no refiriéndose a Isaac sino a Cristo, esa fe le fue contada por justicia.
“La historia de Jacob y Esaú nos muestra cuál es la elección de Dios, la predestinación de Dios: ‘el débil, sin tener condición alguna, recibe la salvación y la bendición de Dios’, pero el que confía en sus obras y en sus méritos es desechado, Rebeca conocía a la perfección la voluntad de Dios. Rebeca cubrió con pieles a Jacob, pudiendo así recibir la bendición de su padre, de la misma manera Jesucristo nos cubre con su preciosa sangre para presentarnos justos y limpios delante de Dios, ha perdonado todos nuestros pecados con su preciosa sangre. Jesucristo murió una sola vez, para presentarse en el tabernáculo del cielo con su propia sangre en pago por el pecado del mundo, habiendo obtenido eterna redención. Revestidos de Jesucristo, Dios nos ve limpios, la sangre de Jesús clama: ¡Ustedes son justos! ¡Ustedes son limpios! ¡Ustedes tienen vida eterna! ¡Gloria a Dios!”, compartió el pastor Shin.
“Estimados consiervos, Rebeca fue solo una sombra, ella entendió muy bien la voluntad de Dios, de la misma manera, Jesucristo nuestro mediador, entiende perfectamente la voluntad de su padre, su voluntad es nuestra salvación, nuestra santificación y que tengamos vida eterna, que nadie se pierda ¡Amén, aleluya!”, concluyó.
Por último, los pastores asistentes pudieron disfrutar de una deliciosa cena, además de tener un valioso tiempo de comunión entre consiervos. Sin duda, sus vidas y ministerios no volverán a ser los mismos, muchos corazones recibieron gran esperanza con la palabra de Dios expuesta durante la reunión. ¡Gloria a Dios!