[Puerto Rico] Noticias de un viaje misionero a las Islas Vírgenes de los Estados Unidos
Del 22 al 24 de septiembre, el pastor y misionero Samuel Choi, junto con su grupo de la Iglesia Buenas Nuevas San Juan en Puerto Rico, realizó un viaje misionero a las Islas Vírgenes de los Estados Unidos, que es un país insular ubicado en el norte del mar Caribe con una población de aproximadamente 100 mil habitantes, donde el inglés es el idioma oficial.
Cada sábado en la mañana, los misioneros centroamericanos comparten noticias de cada país y el corazón que Dios les ha dado a través de Zoom. Además, dedican tiempo a recibir la consejería de la iglesia y de los líderes pastorales. Hace 3 semanas, en la reunión de los misioneros centroamericanos, hablaron de cuando David conquistó la ciudad de Jebús.
Decían: “Después de unir su corazón a Dios, David quiso apoderarse de la ciudad de Jebús. Con ese corazón, David pudo lograrlo. Hasta entonces, por 490 años ningún enemigo había podido apoderarse de ella. David pudo ver un canal que era un pasadizo escondido para invadir la ciudad de Jebús. Después de unir su corazón a Dios, pudo subir por él y conquistar la ciudad”.
Al final de la reunión, se expresó el deseo de la iglesia de llevar el Evangelio a varios países del Caribe. Frente a esa expresión, el misionero Choi pensó: “En estos momentos estoy solicitando la residencia permanente, por lo que no puedo ir a ningún otro país que no sea Estados Unidos” pero el deseo de visitar otro país en el Caribe no desapareció.
Mientras buscaba una solución, descubrió que las Islas Vírgenes, las islas caribeñas más cercanas a Puerto Rico, son un territorio estadounidense, por lo que se pueden visitar independientemente del estatus de solicitud de residencia permanente. Sin embargo, son un conjunto de islas donde solo se habla inglés por lo que, como misionero de habla hispana, sintió la barrera del idioma y el hecho de no tener contactos en ese país fue una carga para él.
Sin embargo, confiando en la voz de Dios, como dijo recientemente el pastor Ock Soo Park: “Cuando nos enfrentamos con fe, el Espíritu Santo obra. El Espíritu Santo no obra en una persona que está quieta” y en el pasaje bíblico: “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio” (1 Timoteo 1: 7), Dios confirmó estas palabras en el corazón del pastor Choi, por lo tanto, compró el boleto de avión primero.
Cuando anunció la noticia del viaje misionero a varios pastores puertorriqueños, el pastor Choi les preguntó si tenían algún contacto en las Islas Vírgenes. La mayoría respondió que no.
El 22 de septiembre salieron de San Juan, capital de Puerto Rico a su alojamiento en la isla de Saint Thomas, capital de las Islas Vírgenes. No había ningún lugar para visitar, por lo que al misionero Choi no le quedó más remedio que buscar a Dios. Cuando llegó al alojamiento y estaba desempacando, recibió una llamada de un número desconocido.
“Me enteré de su visita, misionero Choi, a través del director de Radio Redentor, la estación de radio cristiana más grande de Puerto Rico. ¿Puede asistir a la ceremonia de graduación de educación para padres de la comunidad de habla hispana organizada por el Ministerio de Justicia esta noche?”
Añadió que si asistía a la ceremonia de graduación podría conocer a varios pastores, senadores y funcionarios del Departamento de Justicia de la comunidad hispanohablante. La persona que había llamado era la reverenda Sandra Ventura de Puerto Rico. Actualmente vive en Orlando (EUA) y había ido a las Islas Vírgenes con una conferencista para apoyar la ceremonia de graduación; dijo que anteriormente había servido en el Ministerio de las Islas Vírgenes.
Gracias a los arreglos de la reverenda Sandra Ventura, el misionero Choi pudo asistir a la “Ceremonia de graduación de educación para padres de la comunidad de habla hispana” organizada por el Departamento de Justicia de las Islas Vírgenes y celebrada en la Iglesia Mount Zion la noche del 22 de septiembre.
Al evento asistieron el senador Milton Potter, varios funcionarios del Departamento de Justicia que dirige a los padres en las Islas Vírgenes, pastores de iglesias de la comunidad de habla hispana y miembros de la comunidad de habla hispana que habían asistido a los talleres de educación para padres.
El misionero Choi estaba aún más agradecido porque no solo estrechó lazos con varios pastores de la comunidad de habla hispana sino que pudo compartir unas palabras desde el púlpito y agendar su participación en eventos para los siguientes días.
Al día siguiente, en la mañana del 23, la reverenda Sandra Ventura presentó al evangelista Wendell Walker, quien le dio al misionero Choi la oportunidad de predicar en inglés. Esa mañana, el evangelista Walker instaló un púlpito, altoparlantes, cámaras y sillas en la plaza central de la ciudad y preparó un seminario bíblico al aire libre para predicar la palabra a los reunidos en la plaza y a través de una transmisión en Facebook. Varios pastores participaron en el seminario y se le dio tiempo al misionero Choi para predicar el evangelio.
“Amados, en Hebreos, capítulo 9, dice: ‘Y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el Lugar Santísimo, habiendo obtenido eterna redención’ (Hebreos 9:12). Dice que Jesús perdonó nuestros pecados para siempre al morir en la cruz. Un verdadero siervo de Dios debe creer y testificar lo que dice la Biblia, que Jesús murió para lavar nuestros pecados y justificarnos.
No hay nadie en este mundo que no haya pecado; sin embargo, cuando Jesús murió en la cruz por nuestros pecados, los lavó para siempre. Creer en este hecho es la verdadera fe. ¿Hay alguien hoy aquí que piense: ‘Soy pecador’?
Todos somos pecadores porque hemos pecado y debido a que pecamos, no tenemos más remedio que ir al infierno pero, amados, Dios, que nos ama, envió a Jesús a esta tierra y le entregó todos nuestros pecados. Cuando Jesucristo murió en la cruz, pagó el precio de todos ellos. Si cree en esto en su corazón y se ha vuelto justo, por favor levante la mano y afírmelo”. (Misionero Samuel Choi)
Después de que predicó el evangelio, la gente allí levantó la mano y afirmó que era justa. Además, una persona llamada Lester Van que escuchó el sermón, subió al podio, se arrodilló y dijo: “Gracias por predicar el Evangelio”, luego tomó con fuerza la mano del misionero Choi, le mostró su tarjeta de identificación y le pidió sinceramente: “Si vuelves a visitarnos, asegúrate de buscarme”.
En la tarde del sábado, el pastor Roberto de Jesús de la iglesia de Dios Rosa de Sarón, a quien conoció en la ceremonia de graduación de educación para padres el día anterior, dirigió al misionero Choi y a su grupo, les dio un recorrido por el mirador con vista panorámica y los invitó a almorzar.
Invitó al misionero Choi al grupo estudiantil de su iglesia y le dio tiempo para socializar con sus estudiantes de escuela dominical. El misionero Choi pudo compartirle el evangelio al pastor De Jesús enfocándose en Levítico 4, repitiendo ambos: “¡Amén!”
“Damos gracias al pastor misionero por llegar hasta aquí en este viaje evangelístico. Como el misionero sabe, la principal fuente de ingresos de las Islas Vírgenes es el turismo, por eso, la mayoría de las personas que hablan español trabaja hasta los domingos.
La iglesia de habla hispana normalmente no ofrece culto en la mañana sino en la tarde. El misionero Choi tomará su avión de regreso el domingo en la tarde, por lo que no pudimos invitarlo a predicar. Por favor, regrese y comparta con nosotros el vívido testimonio de Puerto Rico y las palabras sobre la eterna redención que compartió conmigo”.
En la noche, el misionero Choi predicó el evangelio a la reverenda Sandra Ventura y a la conferencista de educación para padres Sandra Garcon, doctora en Psicología, a quienes conoció en la ceremonia de graduación del día anterior. “¡Pastor! Tengo una pregunta. ¿Cómo se le ocurrió hacer un viaje evangelístico a un lugar en el que no tiene contactos?”
“Dios me puso en el corazón visitar las islas del Caribe a través de la iglesia y sus siervos. Pensé: ‘Dios me puso esto en el corazón pero si no doy el paso y solo miro las circunstancias y lo pospongo, no podré visitar una isla caribeña este año a pesar de que vivo en el Caribe’. Así que di el paso.
En 1 Corintios 2:9 dice: ‘Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido en corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los que le aman’. Aunque no podemos verlo, Dios preparó la tierra seca en medio del mar Rojo para los israelitas que salieron de Egipto.
Dios me envió a la reverenda Sandra Ventura como ayuda idónea para este viaje evangelístico y pude sentir que Dios me estuvo ayudando en todo el viaje. Al igual que la tierra seca que Dios preparó en medio del mar Rojo, lo que Dios ha preparado es invisible para la mayoría de las personas, así que solo viven pensando de sí mismos que son pecadores.
Sin embargo, Dios preparó a Jesús, el Cordero, para nosotros y nos ha hecho santos, perfectos y sin mancha”. (Misionero Samuel Choi) La reverenda Sandra Ventura planea visitar Puerto Rico el 10 de octubre para reunirse nuevamente con el misionero Choi y estrechar los lazos.
Sharon McDonald está a cargo de la educación para padres en el Departamento de Justicia y fue quien ofició la ceremonia de graduación. La mañana del domingo 24, el misionero Choi fue a Impacting Your World Church donde se encontraba el esposo de la encargada McDonald. Allí compartió en el servicio dominical y tuvo un momento para presentar a la Misión.
El servicio de ese día fue un programa especial, por lo que el misionero Choi no pudo predicar pero pudo tener una relación más cercana con la encargada McDonald, quien está a cargo de la educación para padres de las Islas Vírgenes bajo el Departamento de Justicia.
El misionero Choi, al regresar de este viaje evangelístico, dijo: “Estoy agradecido porque el primer viaje evangelístico a las Islas Vírgenes fue una oportunidad para conocer a personas que se convertirán en enlace para difundir allí el Evangelio, entre ellas, varios pastores hispanohablantes, la directora de educación para padres del Departamento de Justicia de las Islas Vírgenes, el senador Milton Potter y la reverenda Sandra Ventura.
Estoy agradecido por haber podido sentir la ayuda de Dios en todo mi trayecto. Cuando obtenga la residencia permanente y me sea posible salir al extranjero, quiero visitar y predicar el Evangelio en cada una de las islas del Caribe.